
El Camino Estoico Ep. 103 – Aceptar la mortalidad de lo que amamos
Epicteto enseña que todo lo que amamos es mortal y que solo al reconocer esa verdad aprendemos a amar sin apego. En el Enquiridión aconseja recordar la fragilidad de los seres y cosas queridas, no para apagar el afecto, sino para hacerlo más consciente. Amar con lucidez es agradecer mientras existe y soltar sin destruirnos cuando se va. Marco Aurelio repite que el amor verdadero no niega la muerte, sino que convive con ella. Quien acepta la finitud vive con más presencia, sin miedo ni ilusión de eternidad. La conciencia de la pérdida inevitable nos invita a tratar mejor, perdonar antes, hablar a tiempo y vivir con gratitud. Aceptar la mortalidad no es frialdad, sino sabiduría: amar sin poseer, disfrutar sin aferrarse y despedirse sin rencor.
