La importancia de la meritocracia

El discurso actual en ciertos sectores sugiere que la meritocracia no existe, lo que puede llevar a una mentalidad de víctima en lugar de fomentar la responsabilidad personal. Se señala que, a pesar de las dificultades, el éxito se basa en el esfuerzo y la dedicación de las personas, ya que nadie alcanza logros significativos sin trabajar para ello. Ante la precariedad laboral y los cambios sociales, se anima a adoptar una mentalidad proactiva, viendo los desafíos como oportunidades para crecer. La clave está en abrazar el trabajo duro y seguir formándose para mejorar las propias circunstancias.