El Arte de la Decisión. Descubre cómo los sesgos y atajos mentales deciden por ti, incluso cuando crees tener el control

• Pedro Vivar describe situaciones comunes donde actuamos sin pensar, como enviar mensajes o comer sin quererlo.
• Estas acciones revelan que no siempre controlamos nuestras decisiones como creemos.

Tus decisiones no siempre son tan conscientes como crees. La mayoría del tiempo funcionamos en automático, guiados no por nuestra razón, sino por sesgos, impulsos y programaciones internas que toman el control antes de que puedas reflexionar.

Pedro Vivar explica que tendemos a justificar nuestras acciones tras el hecho, actuando como abogados de nuestras propias decisiones en lugar de jueces imparciales.

Para mejorar, no basta con entender este fenómeno sino entrenar la lucidez y el autoconocimiento, enfocándonos en momentos clave para evitar ser manipulados por heurísticos y sesgos como el coste hundido o la falacia del falso dilema.

El entrenamiento de la lucidez es como un músculo: se fortalece con fricción, incomodidad voluntaria y presencia consciente, lo que permite tomar decisiones más racionales y conscientes.

• Somos conscientes solo en momentos breves y la mayoría del tiempo actuamos en piloto automático.
• Nuestros sesgos y programación interna toman decisiones antes que nosotros.