**La importancia del sueño en la regeneración fisiológica **

Durante el sueño, se produce una reorganización energética que prioriza la energía hacia el cerebro y el sistema inmunitario. Esto explica por qué, en momentos de enfermedad, las personas sienten la necesidad de descansar más; su cuerpo necesita dirigir energía para combatir infecciones. La falta de sueño compromete el refuerzo del sistema inmunitario, lo que aumenta la vulnerabilidad a virus y bacterias. Además, el cerebro utiliza el sueño para eliminar desechos celulares mediante un sistema linfático específico, y su deficiencia puede conducir a la acumulación de proteínas nocivas, elevando el riesgo de enfermedades neurodegenerativas como Alzheimer y Parkinson. En términos metabólicos, incluso una noche de mal descanso puede desencadenar un aumento de la glucosa y de la resistencia a la insulina, así como una disminución en la función cognitiva, la concentración y el autocontrol. Esto lleva a comportamientos más impulsivos, disminuye la motivación para hacer ejercicio y afecta negativamente la alimentación, creando un ciclo de deterioro físico y mental del que muchas veces no se es consciente.