Quién es Gustavo Cordera? Quién sabe, no? Acaso él mismo lo sepa? Seguramente sea todo eso y más. Lo que no podemos negar es su magnetismo. Es un artista. Es humano. Como vos y como yo. Lo he dicho varias veces, en esta etapa actual que transito intento convertirme en un observador que no es ni juez ni verdugo. Quienes se sientan conmigo a conversar tienen toda la libertad y el tiempo del mundo para expresarse. Después nosotros, como audiencia, vamos decidiendo, como podemos, qué hacer con esto que sucede en QUP. Nada es definitivo. Todo se transforma.
Con Gustavo Olmedo.
