Aunque no siempre lo reconozcan todos los músicos que formaron bandas en Seattle escuchaban heavy metal. Muchos, lo tocaban. Y tuvieron bandas ridículas con nombres ridículos, de imagen ridícula, como mandaba la época. Alice In Chains deja de a poco el sonido inspirado en Mötley Crüe y Dokken y, gracias a Soundgarden, se acercan a Sabbath. Toman lo que encuentran y lo transforman. Cuando están listos, son contratados por Columbia.
Con Gustavo Olmedo.
Quemar un Patrullero