El día a día de un hospital público nos deja casos tan apasionantes como el de pacientes que reciben a diario (y gratis, esto es, gracias a todos los contribuyentes) tratamientos de cientos de miles de euros; que se benefician de tecnologías impensables hacen apenas unos años; o casos tan misteriosos que obligan a los médicos a olvidarse de lo que está escrito en los libros... Nuestro guía por la pública, el nefrólogo Borja Quiroga, nos cuenta el caso de un dolor de garganta que acabó en infarto y que resolvió una residente de primer año.